Iniciado por
Peto
Pues yo, alcanzado el 30% de La Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España, de Bernal Díaz del Castillo, me voy a tomar un merecido descanso del castellano antiguo y he cambiado de registro para revisitar la que a mi juicio es la mejor novela de CF jamás escrita, Dune, de Frank Herbert.
Qué puedo decir del libro de Díaz del Castillo... por una parte, es una pasada. Las cosas que cuenta son sorprendentes, con frecuencia apasionantes y a menudo horrorosas. La manera en que los españoles, apenas 400, irrumpieron en una región densamente poblada y muy militarizada y fueron avanzando, com dicen ellos, barba sobre hombro, o sea, acojonados perdidos, pero con una determinación de hierro, venciendo batallas pero sabiéndose en abrumadora inferioridad numérica y conocedores de las atroces muertes que les esperaban si eran derrotados y capturados, es difícil de entender. La cantidad de sacrificios humanos realizadas en todas las poblaciones que alcanzaban, en pequeñas pirámides en las que todo se embadurnaba con la sangre de las víctimas, con frecuencia niños, y las vísceras se ofrecían a sus dioses, las habituales muestras de canibalismo, las amenazas directas de que ese iba a ser su destino... Díaz del Castillo lo cuenta con una sencillez que no oculta el horror y termina por decir que no va a insistir en el tema porque no aporta novedad, pero que el lector tenga en cuenta que esa era la tónica general... escalofriante. Es difícil entender qué impulsaba a esta gente a jugársela de esa manera.
Por otro lado, es una relación bastante pormenorizada de la llegada de los Españoles a Centroamérica, con lo que a ratos resulta repetitiva. Desde el punto de vista lingüístico, la narración está llena de expresiones y términos que con frecuencia son familiares pero están usados de manera totalmente diferente, lo que la hace espesa. Desde el punto de vista etimológico, la lectura es muy curiosa e interesante (por ejemplo, los Mexica y otros se protegen con arma de algodón, cosa que desorienta hasta que entiendes que los españoles se protegen a su vez con arma dura), pero tanto la repetición de situaciones como el lenguaje empleado hacen que la fatiga se acumule. Hace un par de días, Cortés y sus hombres llegaron por fin a Tenochtitlan después de un largo periplo y múltiples enfrentamientos con diversas ciudades estado locales. Y, sabiendo todo lo que viene por delante dado que me conozco la historia, me voy a tomar un descanso antes de leer lo que aconteció entre la llegada a Tenochtitlán y la Noche Triste. Ahí calculo que haré otra parada antes de meterme con la lamentable destrucción final de la capital del Imperio Azteca.
En cuanto a Dune, ya la leí un par de veces en el s. XX pero, dado que este año viene un nuevo intento de llevarla al cine (esperemos que este sea más decente que los anteriores aunque soy escéptico), voy a leerme una vez más el primero y después ya veremos si me lío con la relectura del resto. Para el que le guste la CF y no haya leído Dune, le espera una sorpresa inolvidable. Lo que puedo decir es que llevo un 10% escaso y que voy recordando detalles de lo que me espera a medida que avanzo. Esos recuerdos no hacen sino aumentar mis ganas de llegar a ellos. Dune es en verdad una fantástica novela en todos los aspectos.