Yo solo repetiría algunos platos. Otros los dejaría pasar, la verdad.
En estas cuestiones nunca tocas las narices, pues no faltaba más. Entrando en materia, considero que ambos tiempos son correctos pero a mí el uso del condicional es... eso, condicional. En cambio el pretérito imperfecto a mí me da una impresión de inmediatez, es como si recién acabado propones hacerlo otra vez.
Pero vamos, es mi manera de entenderlo y, como todo, admite debate. Te animo a que sigas tocándome las narices.
Y te entiendo, pero al fin y a la postre lo que nos sitúa dónde y cómo estamos es haber comido todos esos platos y, desde mi punto de vista, si hoy me encuentro a gusto y feliz en líneas generales, los doy todos por buenos.
Recuerda la ley de Murphy: "Ningún experimento es un completo fracaso. Al menos indica lo que no debe hacerse".
Fiel a la cita, cada 21 de marzo, la esquela de Elenita (este año, parece algo más convencional ¿no?):
Contra la seducción:
No os dejéis seducir / no hay retorno alguno. / El día está a las puertas, / hay ya viento nocturno / no vendrá otra mañana.
No os dejéis engañar / Con que la vida es poco. / Bebedla a grandes tragos / porque no os bastará / cuando hayáis de perderla.
No os dejéis consolar. / Vuestro tiempo no es mucho. / El lodo, a los podridos. / La vida es lo más grande: / perderla es perder todo.
Bertolt Brecht