Vamos allá, estas son las obras propuestas para el mes que viene:
En 1960 Ken Kesey, estudiante universitario, se ofreció como voluntario para los experimentos sobre drogas psicodélicas que los psiquiatras de un hospital californiano ensayaban para futuros usos terapéuticos. De esta experiencia personal nació Alguien voló sobre el nido del cuco. Su protagonista, Randle McMurphy, que se finge loco para escapar a los rigores de la cárcel, es destinado a la sala del hospital psiquiátrico que dirige Ratched, la sádica Gran Enfermera. McMurphy, vital, generoso, amoral y rebelde, librará una guerra contra la Gran Enfermera.
Un amor de Swann, largo relato que forma parte de en busca del tiempo perdido (tomo I. del lado de Swann, 1913), pero que puede leerse de forma independiente, narra la pasión turbadora del exquisito Charles Swann por una Cocotte, Odette de Crécy, a la que había cortejado en un ambiente ajeno a el, el de los Verdurin, burgueses ricos y vanidosos, Swann sufrirá por Odette el invasor tormento de los celos, y su posterior arrepentimiento: "¡pensar que he malgastado años de mi vida, que he querido morirme, que he tenido el amor mas grande de mi existencia por una mujer que no me gustaba, que no era mi tipo!. Breve tratado sobre la función del arte, la irrealidad del amor —nacimiento, desarrollo y muerte de la pasión— y la realidad de los celos, un amor de Swann resulta la mejor introducción al deslumbrante universo proustiano.
Un carterista japonés a merced del destino. ¿Crees en el destino?... El ladrón es un carterista experto. Sus víctimas solo son para él extraños, rostros sin nombre a los que robar. No tiene familia, ni amigos, ni relaciones.... Pero tiene un pasado, un pasado del que se vio obligado a huir tras realizar un trabajo aparentemente fácil: atracar a un viejo rico para robar el contenido de su caja fuerte, nadie tenía que salir herido. A su regreso a Tokio, el ladrón se verá de nuevo atrapado por los acontecimientos en una intriga de la que ni siquiera él podrá escapar. Un impactante relato que ahonda, con detalle y apabullante tensión, en el placer del mal.
Mientras aterriza en un aeropuerto europeo, Toru Watanabe, un ejecutivo de 37 años, escucha una vieja canción de los Beatles que le hace retroceder a su juventud, al turbulento Tokio de los años sesenta. Con una mezcla de melancolía y desasosiego, Toru recuerda entonces a la inestable y misteriosa Naoko, la novia de su mejor y único amigo de la adolescencia, Kizuki. El suicidio de éste distanció a Toru y a Naoko durante un año, hasta que se reencontraron e iniciaron una relación íntima. Sin embargo, la aparición de otra mujer en la vida de Toru le lleva a experimentar el deslumbramiento y el desengaño allí donde todo debería cobrar sentido: el sexo, el amor y la muerte. Y ningún de los personajes parece capaz de alcanzar el frágil equilibrio entre las esperanzas juveniles y la necesidad de encontrar un lugar en el mundo.
Momo es una pequeña niña que vive en las ruinas de un anfiteatro de una gran ciudad italiana. Es feliz, buena, cariñosa, con muchos amigos, y tiene una gran virtud: la de saber escuchar. Por eso, es una persona a la que mucha gente acude para desahogarse y contar las penas, ya que ella es capaz de encontrar una solución para todos los problemas.
Sin embargo, una amenaza se abalanza sobre la tranquilidad de la ciudad y pretende destruír la paz de sus habitantes. Llegan los Hombres Grises, unos extraños seres que viven parasitando del tiempo de los hombres, y convencen a la ciudad para que les entregue su tiempo.
«Mamá, ¿allá atrás se acaba el mundo?»
Esta frase abre camino a una historia fascinante: la de un hombre de enorme talento destinado a desentrañar los misterios de la astronomía. Lorenzo de Tena, inconformista y rebelde, deberá luchar contra las desigualdades sociales, las trampas burocráticas y las tentaciones políticas para ver realizada su vocación. Pero los mayores retos de su búsqueda no vendrán de la ciencia sino de la cara más oculta de las personas, la que esconde las pasiones y los sentimientos.
Una novela que, como un telescopio, nos acerca a los desafíos más inalcanzables: las estrellas y el amor.
El punto de arranque de la historia, como decíamos, no se aleja demasiado de la tradición literaria más inmediata: la tranquilidad de los burgueses aposentados en un hotel cerca de Montecarlo se verá turbada cuando una de las huéspedes, Mme. Henriette, mujer de un comerciante y madre de dos niñas, dama exquisita y discreta, se de a la fuga con un atractivo joven que acababa de conocer apenas veinticuatro horas antes. Puesto que la naturaleza humana es dada al chismorreo, los otros huéspedes no tardarán en hacerse eco de la noticia e inmediatamente a reprochar, de acuerdo con la moral burguesa, la acción de Mme. Henriette. La controversia surgirá, sin embargo, cuando el narrador decida defender, frente a las críticas de sus contertulianos, el honor de la dama, sosteniendo que el modo en que esta obró demuestra en realidad mayor franqueza y valor que el de aquellas mujeres que se someten a pesar suyo a una vida de hastío y de miseria. La cuestión, entonces, queda planteada en los términos siguientes: ¿pueden ser bastantes veinticuatro horas para que una mujer honesta descubra dentro de sí, más allá de todas las estrictas convenciones sociales, un destello de vida, y se aboque a él como el único camino acorde con su destino? ¿Merece por ello realmente el oprobio?
(...) Sybil simbolizaba para él todo lo que es bueno y noble en el mundo. De pronto sintió una instintiva aversión hacia la tarea para la que el destino le había señalado, pero al poco tiempo aquella sensación se desvaneció. Su corazón le decía que aquello no era un crimen, sino un sacrificio, y su razón le recordó que no le quedaba otra salida. (...)
Con estas palabras, el personaje que Oscar Wilde construyó hábilmente en esta jocosa sátira de la época victoriana, el cínico lord Arthur Saville, se plantea un dilema moral en el que enfrenta su futura felicidad a su inexorable destino.En El crimen de lord Arthur Saville se nos revela el Wilde en estado puro, el observador más irónico y despiadado de una sociedad decadente y egoísta. Una historia excepcionalmente elaborada que, con un estilo exquisito, indaga en los profundos recovecos de la culpa y el deseo, obsesiones recurrentes en toda la obra del genial escritor dublinés.
Ah, podeis escoger más de una opción