Eso es lo que le dijeron a un conocido mío hace unos años, después de llevar un tiempo trabajando en su empresa. A cambio iba a ganar 3.000 € al mes y a él le pareció tan tentador que aceptó. Ahora, después de varios años ha sido 'despedido' y ha demandado a la empresa intentando demostrar que en realidad había seguido siendo un trabajador por cuenta ajena. Pero resulta que no tiene pruebas y por el contrario la empresa presentó en el juicio a tres testigos en su contra que eran sus ex-compañeros.
Lo cierto es que lo tiene muy difícil y está muy desmoralizado. Hay decisiones muy importantes a lo largo de la vida en las que no conviene equivocarse, porque un error puede ser casi suicida.
Espero que este caso pueda servir como vacuna a alguien.