Cita Iniciado por Terisa Ver mensaje
Yo iba a un kiosco al lado de casa de mi tía todos los viernes a cambiar novelas.
Cuando yo era pequeña, había un kiosco en mi barrio que también cambiaba novelas. Mis tíos eran muy aficionados y yo se las cogía prestadas. Me gustaban las policíacas y las de ciencia ficción, pero no las del oeste.

Cambiando de tema, ayer terminé la octava novela del inspector Mascarell: Ocho días de marzo. Me ha gustado tanto o más que las anteriores. Jordi Sierra i Fabra escribe muy bien y me gusta mucho el ambiente de esta serie. Me recuerda a todo lo que la gente de la generación de mis abuelos y la de mis padres me contaba sobre la guerra y la posguerra: el miedo, el hambre, las calamidades... y la esperanza de que todo eso cambiara alguna vez.