Tengo un lector de la marca Samsung y cada vez que le da un poco de luz a la pantalla se apaga. Bueno, realmente no se apaga, es como si se le fuese la tienda, no retiene el contraste y es muy difícil de nuevo que se vuelva a recargar. He intentado hacer que actualice las páginas con cada clic, en vez que, con cada capítulo, sin embargo, sigue haciendo exactamente lo mismo, aunque con la luz de casa se comporta perfectamente, va algo lento, porque ya tiene casi 10 años, pues era uno de los primeros que sacaron, y tiene ya sus decenas de libros leídos, pero me gustaría conservarlo. ¿Alguien me dice que le puede pasar o que puedo hacer para que se ponga bien?