Iniciado por
Antonio Goldberg
Pensé que me habría librado de él para siempre. Pero el Sr. Segovia me ha agarrado de los cuernos y me obliga a dar explicaciones. Me culpa a mí de los ataques de "la panda", de esos críticos virtuales, de esos críticos sin cara y sin cabeza. Me amenaza incluso con volver a encerrarme en una de sus infectas novelas si no dejo de hablar por su boca. Pobre Sr. Segovia, desde que fue objeto del ataque de "la panda", desde que sucumbió a la ira de esas réplicas poligoneras del Dr. House o Risto Mejide, ni siquiera sale de casa por temor a encontrarse con uno de esos pandilleros. Ni sale de casa, sólo se alimenta de pizza pedida por teléfono y está engordando aún más.
Le expliqué al Sr. Segovia que lo mejor que podía hacer era aprender de esas eminencias. Pero cuando el pobre Sr. Segovia entró en algún hilo al azar de alguno de los de "la panda" y leyó que la eminencia utilizaba, para referirise a una novela de un Premio Nobel, partes de su aparato genital, comprendió que esas herramientas analíticas se encontraban muy lejos de sus capacidades.
Lo más curioso del asunto es que la propuesta era criticar a la "industria del libro" que cada vez hace productos más prefabricados, y se decía con toda claridad que el pobre Sr. Segovia NO estaba de acuerdo en que el lector medio español fuese incompetente, e incluso proponía un relato propio como ejemplo de algo que la "industria" rechaza siendo un relato "nada especial" ni complejo de leer.
Claro que, si los de "la panda" ni siquiera entendieron esto... cómo van a entender cinco o seis oraciones subordinadas...
Lo curioso es que los de "la panda" se hayan dado por aludidos en cuanto leyeron ese titular de "lector incompetente", es como si cuando caminamos por la calle y escuchamos una voz que grita "tonto" nos girásemos para ver quién nos llama..
De todas formas, el Sr. Segovia, pálido y entristecido, al borde del auto-flagelamiento, me ha comunicado a mí, su fiel servidor, que ni una palabra más. No estamos para rabietas de nenes, me ha dicho.
Pero esperen y lean, verán como uno a uno vuelven a atacar, como uno a uno se desenmascaran y vuelven a la carga. Esperen y verán como levantan la patita para hacer sus necesidades a la sombra de mi árbol genealógico. Esperen y lean... porque estos "malotes", estos críticos de cantina volveran a darse por aludidos... Uno a uno, una a una.. volverán a ponerse en evidencia porque es eso lo que les gusta.